4° Encuesta Nacional de Factores de Riesgo Fuentes: ..."Fabiola Czubaj, 15/04/2019, Alimentación: dos tercios de los adultos tienen exceso de peso en el país, La Nación, https://www.lanacion.com.ar/sociedad/alimentacion"......."https://www.indec.gob.ar , http://www.msal.gob.ar "...La Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) forma parte del Sistema de Vigilancia de Enfermedades No Transmisibles (ENT) y del Sistema Integrado de Encuestas a Hogares (SIEH). Proporciona información válida, confiable y oportuna sobre factores de riesgo (como consumo de tabaco, alcohol, alimentación, actividad física, entre otros), procesos de atención en el sistema de salud y principales ENT en la población argentina (hipertensión, diabetes, obesidad y otras). Esta cuarta edición se desarrolló entre septiembre y diciembre de 2018, en el marco de un plan de acción conjunto entre el Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y las direcciones provinciales de Estadística (DPE). Fue realizada con anterioridad en los años 2005, 2009 y 2013. En esta edición por primera vez se realizaron mediciones objetivas a una submuestra de hogares, que incluyeron mediciones físicas (presión arterial, peso, talla y perímetro de cintura) y mediciones bioquímicas (glucemia capilar y colesterol total). Actividad física La prevalencia de actividad física baja aumentó significativamente respecto de la ENFR 2013, alcanzando a 6 de cada 10 individuos. Alimentación El indicador de uso de sal después de la cocción o al sentarse a la mesa (siempre/casi siempre) se mantuvo estable respecto de la 3ra edición de la ENFR. El indicador de consumo de al menos 5 porciones diarias de frutas o verduras al día no reflejó cambios estadísticamente significativos respecto de la edición anterior: solo el 6% de la población cumplió con la recomendación de consumo diario Peso corporal En la fase de autorreporte de la ENFR 2018, 6 de cada 10 adultos presentaron exceso de peso (sobrepeso + obesidad). Se evidenció un aumento sostenido desde la primera edición de la encuesta en 2005 y un aumento estadísticamente significativo respecto de la ENFR 2013. El indicador de sobrepeso no evidenció cambios estadísticamente significativos respecto de la 3ra ENFR. Se registró obesidad en un cuarto de la población, indicador que aumentó 22% respecto de la edición 2013 y 74% respecto a la primera edición (2005). Actividad física y prevención del sedentarismoLa actividad física baja aumentó de 54,7% a 64,9% en los adultos. Este incremento está en línea con la evidencia internacional que muestra que la prevalencia de inactividad física aumentó en los últimos años en América Latina y el Caribe. El incremento de este indicador contribuye a la epidemia creciente de obesidad y expresa la necesidad de profundizar las políticas públicas para promover la actividad física en toda la población, con un enfoque inclusivo y de protección de derechos. En países como Argentina, con una rápida urbanización, es necesario poner en marcha políticas poblacionales a favor del transporte activo, entornos laborales y escolares físicamente activos y la participación en propuestas de actividad física, deporte y recreación en espacios comunitarios.Como parte del Plan Nacional Así para la prevención de sobrepeso y obesidad, el Programa Nacional de Lucha Contra el Sedentarismo, participa de iniciativas que atraviesan transversalmente todos los componentes del Plan. En este marco, se incluyeron recomendaciones sobre actividad física en la Guía de Entornos Escolares Saludables anteriormente mencionada y se encuentra en elaboración un consenso para desincentivar el apto físico como un requisito para que los NNyA realicen educación física en la escuela. Este requisito no cuenta con evidencia de respaldo, ninguna institución científica internacional lo recomienda y en la práctica opera como una barrera para que los NNyA realicen actividad física. El consenso está siendo trabajado en colaboración con el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología y con organizaciones científicas, académicas y de la sociedad civil. Para promover la adopción de políticas efectivas por parte de las provincias y municipios se conformó el Consejo Nacional de Promoción de la Actividad Física y se brinda asistencia técnica, en colaboración con el programa PROTEGER, para la adopción de políticas que promuevan provincias/ municipios físicamente activos. Glucemia elevada o Diabetes. Para el segundo semestre de 2019 está previsto el lanzamiento de un Plan Nacional de Prevención, Diagnóstico y Tratamiento de la Diabetes en el primer nivel de atención que integre todas las iniciativas antes mencionadas. *Asimismo las acciones del Plan Nacional ASI para prevenir la obesidad, mejorar los patrones alimentarios y promover la actividad física conllevan beneficios para la prevención de la diabetes. Hipertensión arterial La Estrategia de Reducción de Sodio, es un componente fundamental para la prevención de la hipertensión arterial, dado que el consumo excesivo de sodio representa su principal factor de riesgo. Asimismo ,las acciones para prevenir la obesidad, mejorar los patrones alimentarios y promover la actividad física, conllevan beneficios para la prevención primaria de la hipertensión arterial. Colesterol elevado.La prevalencia auto reportada de colesterol elevado se mantuvo estable en 28,9% de la población, sin cambios significativos respecto de las ediciones previas de la Encuesta. Lo mencionado para hipertensión y diabetes, es aplicable también a colesterol.El Programa Nacional de Prevención de las Enfermedades Cardiovasculares, junto con el Área de Servicios de Salud de la DNPSyCENT, está iniciando la actualización de la Guía De Práctica Clínica de Riesgo Cardiovascular Global, cuya publicación está prevista para finales de 2020. Del mismo modo, se están llevando a cabo capacitaciones para los equipos de salud sobre abordaje de las dislipemias en el marco de los cursos MAPEC (Modelo de Atención de Personas con Enfermedades Crónicas). Conclusiones: Dos tercios de los adultos tienen exceso de peso en el país El 66,1% de los mayores de 18 años del país tiene sobrepeso u obesidad, mientras que casi el 65% hace poca actividad física, de acuerdo con los resultados preliminares de esta nueva edición de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo que se presentó esta tarde. En 13 años, la población joven y adulta con exceso de peso creció casi de la mitad (49%) a dos tercios en el país. Mientras que el 61,6% dijo que pesaba de más, las mediciones revelaron que el 66,1% estaba excedido de peso de acuerdo con el índice de masa corporal o IMC (un valor que tiene en cuenta la relación entre el peso y la talla). Lo mismo sucedió al distinguir entre sobrepeso y obesidad: el 36,2% respondió que tenía un IMC de entre 25 y 29,9 (sobrepeso), cuando el 33,7% estaba dentro de esa categoría, y el 25,4% dijo que era obeso, cuando el 32,4% lo era de acuerdo con el IMC (30 o más). "Los datos son alarmantes", señalan las autoridades sanitarias en el primer informe de resultados que se presentó esta tarde en el Salón Ramón Carrillo de la planta baja del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación. Los cuadros muestran que la obesidad percibida entre los adultos creció del 20,8 al 25,4% solo en los últimos cinco años. "Que el sobrepeso se haya mantenido estable solo expresa que un número significativo de personas que tenían sobrepeso pasaron a la categoría de obesidad y que una proporción de quienes tenían peso normal, pasaron a la categoría de sobrepeso", interpreta el equipo de la Dirección Nacional de Promoción de la Salud y el Control de las Enfermedades No Transmisibles (ENT) de la cartera sanitaria nacional. "Desde que empezó la encuesta en 2005, en menos de 15 años, la obesidad aumentó casi un 75 por ciento", comentó Adolfo Rubinstein, secretario de Salud de la Nación. "Ahora, por primera vez, vamos a tener mediciones objetivas", destacó en diálogo con LA NACION minutos antes de la presentación. Participaron, además, Jorge Todesca, director del INDEC; Guillermo Manzano, director nacional de Estadísticas de Condiciones de Vida del INDEC, y Verónica Schoj, titular de la dirección nacional de control de las ENT. Los factores de riesgo evaluados, que incluyen también el sedentarismo, el consumo excesivo de sal, el tabaquismo, la hipertensión, la glucosa y el colesterol en sangre elevados, el consumo elevado de alcohol y hasta no usar el cinturón de seguridad y el casco, son responsables de tres de cada cuatro muertes por lesiones, diabetes, enfermedades cardiovasculares y respiratorias o algunos cánceres, entre otras. "En la Argentina, las ENT son responsables del 73,4% de las muertes y el 52% de los años de vida perdidos por muerte prematura y el 76% de los años de vida con discapacidad", recordó Schoj durante la presentación.La encuesta, de 20 páginas, también indagó si la población hace menos actividad física que la aconsejada (30 minutos diarios): seis de cada 10 dijo que no cumplía con esa meta, comparado con cinco de cada 10 hace cinco años,y o dos de cada 10 hace 13 años. No varió demasiado en los últimos cinco años la toma de conciencia en la población sobre el consumo de sal "siempre o casi siempre" una vez servida la comida (otra encuesta, aún sin difundir, midió la presencia de sodio en orina). Tampoco lo hizo el consumo de por lo menos cinco porciones de frutas y verduras por día, como se recomienda para comer más saludablemente. La población con presión alta (140-90 mmHg) alcanzó el 40,6% al momento de usar un tensiómetro, comparado con el 34,6% que alguna vez se había controlado la presión. Pero seis de cada 10 que dijeron que eran hipertensos y 3 de cada 10 que dijeron que no lo eran tenían la presión alta al momento de evaluarlos. Es decir que el control clínico podría ser insuficiente en unos y que el subdiagnóstico de la hipertensión podría ser alto, en otros. Algo similar sucedió al preguntar sobre la glucemia elevada o la diabetes: "Que el 5% de la población que se refirió como no diabética tuviera la glucemia elevada demuestra, por un lado, el subdiagnóstico y, por el otro, la necesidad de fortalecer la detección de las personas con diabetes", resume el informe. Y mientras que el 28,9% dijo tener colesterol alto, las pruebas de laboratorio comprobaron que el 30,7% tenía valores elevados (200 mg/dl o más). Sí disminuyó el tabaquismo (un 25% desde 2005, cuando se hizo la primera encuesta nacional) y la exposición al humo de tabaco en las casas y los lugares de trabajo, aunque no tanto en los bares y los restaurantes, lo que indicaría un incumplimiento de la norma de ambientes 100% libres de humo. Es, además, la primera vez que se releva cuántos argentinos mayores de 18 fuman cigarrillo electrónico. El 1,1% dijo consumir este producto de venta prohibida en el país. "Esto demuestra que el principal problema de la epidemia de tabaquismo en la Argentina continúa siendo el consumo de cigarrillos comunes", sentencia el informe. "Vamos a tener una línea de base muy robusta, basada en datos, para la promoción de la alimentación saludable, el mejoramiento de los entornos escolares, las políticas de etiquetado frontal y la calidad nutricional de los programas para población más vulnerable que, en el contexto actual de crisis, hay que mejorar", dijo Rubinstein sobre estos nuevos datos poblacionales. En tanto, Schoj destacó la importancia de esta actualización del diagnóstico epidemiológico de los factores de riesgo de las ENT para "la toma de decisión inmediata" en las políticas públicas de regulación de los entornos escolares, el marketing de productos con bajo valor nutricional y el etiquetado de alimentos, entre otras, además de la implementación de políticas fiscales de probada efectividad en el mundo tanto para detener la epidemia de obesidad como desalentar el consumo de productos de tabaco. "Esas serían las dos medidas con mayor impacto para reducir la mortalidad que quisiéramos que los datos de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo ayuden a impulsar, además de concientizar a los responsables de la toma de decisiones en otras áreas para acompañar las políticas de salud pública y lograr aquellos objetivos", sostuvo Schoj. Los resultados describen los factores de riesgo de los argentinos mayores de 18 años que viven en localidades de 5000 habitantes o más. Con otras cuatro encuestas, cuyos resultados se difundirán en los próximos meses, se conocerán datos del resto de la población, incluidos los chicos y adolescentes, las embarazadas o los adultos mayores.